martes, 15 de abril de 2025

¿Creación de Adán o Creación del Cerebro?

 

  

     El fresco de La Creación ha sido quizás la imagen más conocida e impactante de las que Miguel Ángel pintó en la bóveda de la Capilla Sixtina del Vaticano. La Creación de Adán representa un episodio bíblico donde Dios, después de crear el mundo, acompañado por una corte de ángeles, crea al hombre (Adán), dándole el “soplo de vida” a través de la unión de sus dos dedos índices. Frank Lynn Meshberger, médico cirujano, publicó en 1990, en una importante revista médica mundial, su artículo  “An Interpretation of Michelangelo’s Creation of Adam Based on Neuroanatomy”,   (Meshberger, 1990). En él se sugiere, que Miguel Ángel intentó plasmar en su pintura la imagen de un cerebro humano, pues en ella se puede constatar una especie de imagen doble en la que se adivina con claridad la silueta del cerebro humano formado por el sudario que envuelve al Dios que da vida a Adán, así como otras estructuras anatómicas.

La utilización de imágenes dobles por la pintura es característica de algunas obras de Dalí, como por ejemplo “Mercado de esclavos con el busto desaparecido de Voltaire, 1940”, en la que por un efecto de las imágenes perceptivas dobles, popularizadas entonces por la Psicología de la Gestalt, Dalí hace que veamos aparecer en el mercado la imagen invisible del busto de Voltaire, con la intención paranoico-crítica de denunciar que el defensor de la Ilustración y los derechos humanos invertía parte de su gran fortuna en el entonces pujante mercado de esclavos. Es un efecto paranoico porque en la contemplación se produce una especie de esquizofrenia por la irrupción de una imagen doble y a la vez es crítica pues pretende desacreditar la sacralizada figura de Voltaire por la intelectualidad progresista.



Miguel Ángel, practicante de disecciones anatómicas, debía conocer bien las partes del cerebro, tal como mantiene Meshberger comparando el dibujo del manto que envuelve a la figura divina y sus acompañantes angélicos con un corte del aspecto izquierdo del hemisferio cerebral. Por otra parte, la relación entre el cerebro y Dios podría provenir de Aristóteles (De Partibus Animalum IV,10, 687 a7-11), el cual habría tergiversado la frase atribuida a Anaxágoras de que “el hombre es más inteligente que los animales porque tiene manos”, en el sentido de que el tener manos dependía de tener un cerebro superior. El médico griego Galeno, al que Miguel Ángel debía haber conocido para llevar a cabo sus disecciones, citaba y seguía en este punto al filósofo. Aristóteles sostenía asimismo que el cerebro es la parte del cuerpo humano que nos asemeja a la divinidad. Por eso Miguel Ángel pinta el manto que envuelve la figura divina de forma velada, quizás para evitar conflictos con la Inquisición, como un cerebro.

No obstante, el centro de la composición pictórica está ocupado por la mano divina y la humana. Ello nos permite utilizarla como un quicio para invertir el sentido aristotélico que podría estar en la intención velada de Miguel Ángel. Pues las obras consideradas geniales escapan muchas veces a las intenciones conscientes del propio artista, permitiendo interpretaciones nuevas y sorprendentes. Por ello se ha apuntado que la inversión del sentido de la imagen podría llevar a la tesis de que es el hombre, un Adán desvitalizado, finito y terrenal, el que ha creado con su imaginación al Dios-cerebro, a la propia y superior inteligencia divina como extrapolación del excelente cerebro humano.  

Nos basta aquí con referirnos a la relación mano-cerebro sobre la cual la Paleoantropología y la Neurología modernas han confirmado que Anaxágoras tendría finalmente razón frente a Aristóteles, cuando sostiene que la inteligencia proviene de una mano anatómicamente extraordinaria que nos dio la superioridad sobre el resto de los animales. La prueba estaría en los estudios sobre la evolución del propio cerebro, el cual no fue creado de golpe y de una pieza por Dios, sino que evolutivamente han ido surgiendo varios cerebros: el reptiliano, el cerebro medio y la corteza cerebral. El crecimiento espectacular de esta última parece estar sobre todo en conexión con la aparición de una mano exenta y capaz de técnicas de construcción de hachas de sílex, y otros artilugios de la industria técnica, que ningún simio anterior podía llevar a cabo. El salto de la capacidad cerebral desde los 250 c.c. de un chimpancé a los 1250 c.c. de un homo sapiens se produjo gradualmente, situándose el Rubicón en el homo hábilis con 700 c.c., en el que se constata por primera vez una industria lítica. Por ello se puede decir hoy con seguridad que la mano hizo al cerebro inteligente, asociado por Aristóteles o Miguel Ángel, por su excelencia, con una imaginada inteligencia divina.

Manuel F. Lorenzo


martes, 11 de marzo de 2025

Corrupción Sistémica

 



     Vuelven los escándalos de la corrupción gubernamental a primera página. Se repite de nuevo lo que ya ocurrió con anteriores Presidentes. Parece que no tiene remedio. Algunos tratan de disculpar esta corrupción incontrolable por la debilidad de las personas humanas, o por que el Sistema económico necesita de esta especie de grasa para funcionar, etc. Seguramente no produciría tanto ruido la corrupción si el país fuese viento en popa y sin grandes problemas que afrontar. Pero la situación económica y social cada vez es más preocupante por el empobrecimiento creciente de la mayoría de los españoles, con los decrecientes sueldos amenazados por la inflación, con la falta de futuro para los más jóvenes, etc. 

Algo serio está entonces fallando. Pues la corrupción, más grave aún que la económica, que también está creciendo incesantemente, es la secesión creciente de regiones como Cataluña y el País Vasco. La causa de ello es un fallo también sistémico. El fallo del Sistema político consiste en que, al ser Parlamentario y no Presidencialista como el de USA, el Presidente necesita de una mayoría de un Congreso polarizado en dos partidos que, cuando empatan a votos, necesitan la ayuda de otros partido más pequeños. No habría problema si existiese un Partido Liberal que hiciese de arbitro, como ocurre en otros países. Pero los sucesivos intentos de crearlo y darle continuidad, desde el CDS de Suarez hasta Ciudadanos, han fracasado. Y como el arbitraje se hizo cada vez más necesario, han sido sustituidos por los partidos de las minorías secesionistas vascas y catalanas, cuyo objetivo es la lucha contra España. Creo que la debilidad del liberalismo español es que suele ser una caricatura de imitación del liberalismo francés o inglés. Ortega y Gasset se dio perfecta cuenta de ello y propuso un liberalismo basado en una filosofía española nueva, el Racio-Vitalismo. Pero no se le ha entendido, como se ha visto en la interpretación federalista del autonomismo de la Constitución actual, en parte inspirado en el propio Ortega. Pues, Autonomismo para Ortega es, sobre todo, descentralización, lo contrario del Confederalismo existente de hecho.

Para ganar las elecciones no bastaba con recurrir al peligroso voto antiespañol de tales minorías, sino que era necesario disponer de grandes sumas de dinero para financiarlas, e incluso llegar a una compra encubierta del voto con los subsidios y peonadas, como se vio en los Eres andaluces. La solución que se encontró fue algo similar al “3 por ciento” que denunció Maragall en el Parlamento catalán. Es decir, que en los contratos con grandes empresas que concede el Gobierno, a cambio se obtiene una buena cantidad para gastos electorales. Muchos militantes y seguidores disculpan esta corrupción porque es dinero para el partido, pero no para nadie en particular. En la democracia de USA esto está reconocido legalmente con las aportaciones de los lobbies. Pero en España esto es ilegal. Por ello es necesario que algunos miembros del partido o personas allegadas se arriesguen a hacer ese trabajo “sucio”.  A cambio perciben unas jugosas “mordidas” o comisiones a título personal. Hay muchas formas de ocultar este enriquecimiento ilícito: ingeniería financiera, paraísos fiscales, etc. De todas formas, la justicia acaba encarcelando a algunos responsables de segundo nivel: los Bárcenas o Ábalos de turno cuya filosofía resume muy bien la frase de Jesús Gil justificando su picaresca empresarial: “de la pobreza es difícil salir, de la cárcel se sale”. Sobre todo si el poder te ayuda: el correo de Rajoy a Barcenas:“Luis, ¡resiste!”.

¿Se puede salir de esta corrupción sistémica? El ejemplo de las corrupción e ineficacia de la Restauración decimonónica indica que la salida fue posible con el golpe de Estado militar de Primo de Ribera. Pero los tiempos han cambiado y los  golpistas militares ni están ni se les espera. El único Poder del Estado que actualmente está chocando con dicha corrupción sistémica es el Poder Judicial. Se ha intentado gobernarlo partidistamente con el Consejo del Poder Judicial y los nombramientos de los jueces del Supremo y del Tribunal Constitucional. Lo mismo se hacía con el nombramiento de los Capitanes Generales por los Gobiernos en la Restauración y en la República, sin poder evitar las asonadas y Golpes militares. Hoy las asonadas las están dando los jueces que se oponen a la amnistía inconstitucional de Puigdemont. ¿Podrá dicho movimiento de jueces llegar a provocar una Tangentópolis (política del soborno) como la que ocurrió en Italia a principios de los 90? El partido Socialista de Crasi y la Democracia Cristiana se hundieron en las elecciones y surgieron nuevos partidos que cambiaron el Sistema político italiano hasta hoy, con los Berlusconi, la Liga del Norte, Meloni, etc. Solo nos queda desear que sus Señorías, miembros del Poder judicial, sean valientes, resistan y procedan ajustados a Derecho.

Manuel F. Lorenzo